lunes, 27 de abril de 2015

TEMA 8. SUPERHÉROES ANÓNIMOS

EL LENGUAJE DE LA NARRACIÓN

Vamos a analizar las características del lenguaje de la narración en el siguiente texto.



El curioso incidente del perro a medianoche, Mark Haddon

La señora Shears probablemente no había matado a Wellington. Pero quien fuera que lo hubiese matado, probablemente lo había matado con la horca de la señora Shears. El cobertizo estaba cerrado. Eso, creía yo, significaba que era alguien que tenía la llave del cobertizo de la señora Shears, o que ella se lo había dejado abierto, o que se había dejado la horca tirada en alguna parte del jardín.

un ruido y me volví y vi a la señora Shears de pie en el césped mirándome. 

Dije:
—He venido a ver si la horca estaba en el cobertizo.

Y ella dijo:
—Si no te vas ahora mismo voy a volver a llamar a la policía.

 Así que me fui a casa. Cuando llegué a casa, le dije hola a Padre, subí y le di de comer a Toby, mi rata, y me sentí contento porque estaba haciendo de detective y descubriendo cosas


Persona gramatical: 

- Vemos que se utiliza la primera persona porque el narrador es el protagonista de la historia, está dentro de ella: "creía yo", "Cuando llegué a casa..."

Intervención de los personajes

Los diálogos de los personajes se reproducen literalmente y su intervención se marca con rayas. 

Los verbos

- Hay verbos que expresan movimiento: me volví y llegué.
- Hay verbos que señalan lo que piensan los personajes: creía
- Hay verbos que indican habla, es decir, que los personajes se comunican: dije y dijo.
- Además, la mayor parte de los verbos aparecen en pretérito: pretérito imperfecto (estaba) o perfecto simple (vi, oí, subí, etc.)




LOS ADVERBIOS DE LUGAR

Vídeo


martes, 21 de abril de 2015

TEMA 8. CIENCIAS SOCIALES.

Documental sobre los reyes católicos.

https://www.youtube.com/watch?v=rDttu7MqHr8

https://www.youtube.com/watch?v=XzbCmR--hHc



PARA AMPLIAR EL PUNTO 2.2. UNIFORMIDAD RELIGIOSA

El escritor catalán Ildefonso Falcones, ya famoso por su obra La catedral del mar, publicó en 2009 la novela La mano de Fátima. Este libro, enmarcado en la triste conmemoración del cuarto centerario de la expulsión de los moriscos españoles, cuenta las desventuras de un morisco alpujarreño: Hernando Ruiz. Éste, a caballo entre la cultura cristiana y musulmana, dirige todos sus esfuerzos en intentar conseguir la permanencia de su pueblo en la Península frente a un entorno cada vez más hostil. Indudablemente fracasará. Todo ello en el marco de sus altibajos familiares (a veces trágicos) y afectivos. Os incluyo varios textos de este libro que nos dan una idea muy clara de la situación de los moriscos y lo problemas que planteaban a los gobernantes del periodo.

TEXTOS

<<—Como recompensa a la capitulación de Bu Abdillah, que los cristianos llamaban Boabdil, ante los españoles, éstos le concedieron en feudo las Alpujarras, donde se retiró junto a su corte. Entre los miembros de esa corte se hallaba su primo, mi padre, un reconocido alfaquí. Pero aquellos reyes aviesos [Reyes Católicos] no se contentaron con eso: sin que Boabdil lo supiera, a sus espaldas, volvieron a comprar a través de un apoderado las tierras que poco antes le habían entregado y le expulsaron de ellas. Casi todos los nobles y grandes señores musulmanes abandonaron España con el «Rey Chico»; salvo mi padre, que decidió quedarse aquí, con su gente, con aquellos que necesitaban los consejos que como alfaquí les proporcionaba. Luego, el cardenal Cisneros, en contra de las capitulaciones de Granada que garantizaban a los mudéjares la convivencia pacífica en su propia religión, convenció a los reyes de que expulsase a todos aquellos mudéjares que no se convirtieran al cristianismo. Casi todos tuvieron que convertirse. ¡No querían abandonar sus tierras, en las que nacieron y criaron a sus hijos! Asperjaron con agua bendita a centenares de nosotros a la vez. Muchos salieron de las iglesias alegando que no les había tocado ni una gota y que por lo tanto seguían siendo musulmanes. [...]>> p. 37


<<Fue precisamente en Portugal [año 1581] donde por primera vez se trató la posibilidad del exterminio en masa de los moriscos españoles. Reunidos el rey [Felipe II], con el conde de Chinchón y el rehabilitado anciano duque de Alba, cuyo carácter no se suavizaba ni siquiera con la vejez, estudiaron la posibilidad de embarcar a todos los moriscos con destino a Berbería para, una vez en alta mar, barrenar las naves a fin de que perecieran ahogados.>>
>>Por fortuna, o quizás porque la armada estaba ocupada en otros menesteres, la matanza de todo un pueblo no se llevó a cabo.>> p. 499



<<Pero al mismo tiempo que los preparativos para la guerra con Inglaterra [1587], llegaron noticias preocupantes para los moriscos. Desde la junta celebrada en Portugal seis años antes, en la que Felipe II había estudiado la posibilidad de embarcarlos a todos y hundirlos en alta mar, se redactaron varios memoriales que aconsejaban la detención de los moriscos y su posterior envío a galeras. Y en ese año de preparativos bélicos se alzó una de las voces más autorizadas del reino de Valencia, la del obispo de Segorbe, don Martín de Salvatierra, quien, apoyado por algunos personajes de igual parecer, dirigió un memorial al consejo en que proponía lo que a su entender constituía la única solución: la castración de todos los varones moriscos, ya fueran adultos o niños.>> pp. 671 y 672


LA PINTURA ESPAÑOLA RENACENTISTA. EL GRECO
Breve documental sobre la obra de El Greco